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Investing.com – El euro registra máximos de tres meses frente al dólar este lunes pues el billete verde sigue de capa caída ante las expectativas de que la Reserva Federal recortará los tipos de interés este año.

El amplia las ganancias de la semana pasada, cuando subió un 1,4% hasta 1,1387, su cota más alta desde el 22 de marzo. El par se sitúa en el nivel de 1,1379 a las 9:12 horas (CET).

El , que sigue la evolución de esta moneda con respecto a una cesta de otras seis divisas principales, baja hasta 95,63, tras desplomarse durante la noche hasta 95,57 después de que la Fed sentara la semana pasada las bases de un posible recorte de los tipos este mismo mes que viene.

Eso lastró el dólar y a su vez revitalizó a algunos de sus homólogos como el euro, que ya se enfrenta a sus propios problemas como la deuda de Italia y la posibilidad de que el Banco Central Europeo flexibilice la política monetaria.

«Es cierto que el BCE tendrá que flexibilizar la política monetaria, especialmente después de que la Fed cambiara su postura hacia una relajación monetaria», dijo Yukio Ishizuki, estratega jefe de divisas de Daiwa Securities.

“Pero el BCE ya emplea una política de tipos de interés negativos y no tiene mucho más margen de relajación aunque quisiera, a diferencia de la Fed. Son factores como éstos lo que parecen haber respaldado el euro».

El sube un 0,14% hasta el nivel de 107,44 yenes tras registrar mínimos de seis meses cerca de 107,04 el viernes.

La divisa estadounidense se ha visto sometida a una presión aún mayor frente al yen, que a menudo sirve de refugio seguro en tiempos de revuelo político, al aumentar las tensiones entre Irán y Estados Unidos.

Pero sería difícil que el billete verde cayera más allá de 105 yenes pues la constante aversión a los activos denominados en dólares es poco probable, ha dicho Koji Fukaya, director de FPG Securities en Tokio.

«Por ejemplo, el alcanzó máximos históricos gracias a los posibles recortes de los tipos. El fuerte interés de los inversores por el riesgo ralentiza cualquier huida hacia el yen», explica Fukaya.

La atención se dirige también hacia si Washington y Pekín podrán resolver su disputa comercial en una cumbre de líderes del grupo de las 20 principales economías del mundo que se celebra en Japón esta semana.

Pero China y Estados Unidos deberían hacer concesiones en las negociaciones comerciales, según ha dicho el viceministro de comercio chino Wang Shouwen este lunes.

El registra máximos de más de dos semanas en 0,6961 después de que el gobernador del Banco de la Reserva de Australia, Philip Lowe, dijera que sería legítimo cuestionar la efectividad de la flexibilización de la política monetaria global para impulsar el crecimiento económico.

Las declaraciones se percibieron como ligeramente menos prudentes, pues hace apenas una semana Lowe dijo que el reciente recorte de los tipos de interés de Australia hasta mínimos históricos de un 1,25% no bastaría para reactivar el crecimiento económico.

El dólar australiano ya estaba bastante estabilizado tras apartarse de los mínimos de cinco meses registrados en 0,6832 la semana pasada cuando la inclinación de la Fed hacia la flexibilización monetaria contribuyó a eclipsar el pesimismo suscitado por la probabilidad de una flexibilización de la política monetaria por parte de países como Australia y Nueva Zelanda.

El registra máximos de dos semanas en 0,6605, aunque se espera que el Banco de la Reserva de Nueva Zelanda imite la postura prudente de otros bancos centrales cuando celebre su reunión de política monetaria el miércoles.